Los juegos del hambre

Los juegos del hambre
En llamas
Sinsajo

Una saga -dicen- juvenil, en la que el mundo real y el ficticio se entrelazan de manera inquietante… A estas alturas, no tiene demasiado sentido escribir un post para contar cuál es el argumento de esta saga, de la que habrás oído sin duda muchas cosas, y de la que, probablemente, ya has visto las adaptaciones cinematográficas. Podría decirse que las películas, en este sentido, son fruto del éxito de la trilogía, y que  forman parte de ese mundo que se llama best sellers: El éxito de la historia hace que las grandes productoras se interesen por ella, y con gran despliegue de medios, recreen las vivencias de esos protagonistas que solo existían sobre el papel, y en millones de imaginaciones. A partir de ese momento, Katniss Everdeen ya no es como tú la pensabas, ni los lugares son como tú los habías imaginado… Son espectaculares, increíbles, pero no son tus paisajes. Curiosamente, no nos quejamos demasiado de que nos los roben, seguramente porque lo que nos dan a cambio también nos satisface.

Suzanne Collins nos transporta a un tiempo futuro incierto, un tanto apocalíptico: Panem es el país que sobrevive a la destrucción de los países de América del Norte, paradigma de las libertades y el progreso. Sin embargo, dicen que nuestra incivilizada civilización tiene sus orígenes en los clásicos, y la autora menciona la leyenda del Minotauro, al que Atenas sacrificaba a siete jóvenes y siete doncellas atenienses, como castigo por los crímenes del pasado. También menciona a los gladiadores romanos, y los tres elementos clave para su éxito: un gobierno despiadado, la necesidad de luchar hasta morir para evitar la muerte, y ser elemento de entretenimiento para la inmensa mayoría. En cualquier caso... violencia en cantidades indescriptibles.

A todo ello se suma su fascinación por los reality shows televisivos, y es casi imposible no darse cuenta de que el Capitolio se podría asemejar a un Gran Hermano, similar al de El show de Truman, una película con mucho encanto, y crítica muy ácida. Si no la has visto, altamente recomendable. Y si piensas que ya has relacionado muchas cosas, indaga sobre el mito de la caverna de Platón, o sobre 1984, obra de Orwell escrita en 1949, y descubrirás que el futuro es más predecible de lo que parece… y que las sagas juveniles también tienen mucha miga, más allá de las historias…

Las injusticias del mundo, la rebeldía, la pasión, la lealtad, la violencia, un triángulo amoroso… incluso que una chica sea protagonista de una historia de trepidante acción pueden ser razones para que la historia te enganche. Si no te asustan los libros gordos, una buena elección. Y si te asustan.. quizá con ellos pierdas el miedo, porque la historia te atrapará, seguro.

¿Cuál de los tres libros te ha gustado más? ¿Qué pasaje te parece increíble?
Y… una pregunta trampa: ¿Mejor libros que pelis?